Montevideo 05 de Mayo de 2014
Comunicado de prensa
A la opinión pública
…que nada nos sea indiferente… es un monstruo grande y pisa fuerte
Nuestra organización Plenaria Memoria y Justicia denuncia y condena:
En estos días se han producido una serie de avances represivos, judicializaciones y criminalizaciones de la pobreza y la protesta que no podemos silenciar.
Desde la Ley de Procedimiento policial junio 2008 al Código de Faltas agosto 2013 la policía en su conjunto, desde las comisarías y los grupos especiales, Granaderos, Republicana, GEP, DOE, y todos sus aparatos especializados han matado, atropellado, torturado, con impunidad agrandada por este marco legislativo.
Sin tregua, se desarrollan Mega operativos, gatillos fáciles, maltratos de todo tipo en cárceles y comisarías, en barrios pobres y vías públicas.
Las calles son de ellos, todos seguimos en la mira.
Toda la vida diaria está estrictamente vigilada.
El margen de libertad individual y colectiva rigurosamente visualizada.
Es la policía y las cámaras de vigilancia las que dictaminan que está bien, que está mal. Restringiendo paso a paso los márgenes de libertad individual y los derechos de expresión y protesta.
Casi naturalmente han instalado un Estado gendarme, incluso dentro de nuestras vidas.
Ya no son los vecinos, los trabajadores, los estudiantes en sus propias organizaciones los que intervienen y opinan y autorregulan la convivencia. En todos lados el policía, la empresa de seguridad, el Estado está ahí, tiras y uniformados y al acecho jueces y fiscales para limitar la protesta y condenar la pobreza. Donde no están ellos están las cámaras, las rejas, los muros electrificados.
A la violencia del hambre y la indigencia le suman la prepotencia policial, siendo la presencia de la policía la chispa que enciende la violencia en canchas de futbol y barrios.
El sistema, que genera la miseria se concede el “derecho” de condenar al que duerme en la calle.
La Ley de procedimiento policial, el código de Faltas y la mentalidad de ubicar como enemigo al portador de cara, conforman a cada rato un estado de peligrosidad para la vida.
Limitando la solidaridad humana, persiguiendo a aquellos que se involucran y sienten la injusticia cometida contra cualquiera en cualquier sitio del mundo y reaccionan. La criminalización no para. No se detiene, va y va, oculta tras la cartelería del mundial de fútbol y la parafernalia electoral.
Cientos de procesados desde agosto 2013 por el Código o Ley de Faltas.
Por dormir en la calle, por gritar, una joven fue procesada por disturbios en un espectáculo público, dos procesados en Maldonado por pintadas convocando al 1º de mayo.
Siguen acosando a los que luchan, continúan recortando los derechos de la protesta. El 1º de mayo se quemó un muñeco con uniforme de milico, los trabajadores fueron catalogados de delincuentes por el ministro Bonomi y se anuncia que serán indagados, que ya están identificados y desde las jerarquías policiales y los sindicatos policiales amenazan y exigen llevar a juicio a los trabajadores. El director de Policía, Julio Guarteche, junto a los sindicatos policiales ya les tiraron a jueces y fiscales el posible delito: atentado agravado.
No es poca cosa que sea desde el local del PIT-CNT, que los botones sindicalizados lancen la ofensiva.
El 2 de mayo desde la Comisaría 15 en 8 de octubre los policías atropellan a varios vendedores -apoyando a la IMM que les confiscó mercadería y patotearon, tiraron al piso a hombres y mujeres para sacarles algunas prendas. Niños con túnicas escolares fueron corridos y empujados por los milicos. Varias personas fueron golpeadas dentro de la 15.
Los sindicatos policiales nunca se sacaron la gorra, no solo no condenan el gatillo fácil y las torturas sino que salen a pedir más represión y condenas para los que luchan.
Amenazando a los trabajadores que quemaron el muñeco, en la conferencia de prensa, dentro del local del PIT-CNT, dijeron: esto no va a quedar acá… Patricia Rodríguez, presidenta de USIP, sostuvo que “en el día de festejo de los trabajadores se sintieron agredidos”. Claramente, además de las armas y balas, tienen micrófonos para amparar la represión, para recortar el margen de la protesta. Claramente, no tienen ni idea que el 1º de mayo es un día de memoria, de lucha, de emancipación de todo lo que ella- ellos representan y defienden.
La policía tiene armas, impunidad y salvoconductos para reprimir y matar.
Nos preguntamos y preguntamos:
¿Los trabajadores, sindicatos y autoridades del PIT-CNT comparten las amenazas que desde su Local, los botones organizados lanzaron a vecinos del Cerro y a trabajadores por luchar el 1º de mayo?
¿No es una paradoja que un 1º de mayo se haga un bruto escándalo y se exija condena por la quema de un muñeco vestido de policía?
¿Acaso a lo largo de la historia de la lucha de clase no ha sido un emblema emancipatorio el repudio a patrones, Estados y sus aparatos represivos, simbolizados en las repudiables botas y uniformes de los mercenarios?
¿Acaso los y las compañeras desaparecidas, asesinadas, torturadas rindieron culto a sus verdugos y sus ornamentos?
Los símbolos de la opresión –a veces- se resumen en simples, sencillas, comprensibles imágenes: un Banco, una iglesia, un patrullero, un uniforme
Basta de criminalizar
Basta de limitar el derecho de protesta
Basta de miseria y basta de criminalizar a los pobres
Todos fuimos la llama que quemó el muñeco
Todos fuimos la mano que lo encendió
Juicio y condena social para los que piden represión y amenazan
Juicio y castigo para los que mandan a reprimir
Juicio y castigo para los que reprimen.
Plenaria Memoria y Justicia