Un nuevo 1º de Mayo nos encuentra en una coyuntura compleja que nos obliga a repensar el presente para aportar, sí desde la memoria histórica, sí desde nuestros más sentidos anhelos, pero con la mirada puesta en nuestro tiempo, y desde ahí discutir desde un pensamiento crítico con la realidad tal cual es, pero sobre todo discutir desde una práctica consecuente y aportar a la acumulación de fuerzas populares para avanzar hacia un verdadero cambio social y no ese ‘cambio’ que al final deja todo como está.
El contexto internacional nos reafirma a los de abajo el viejo pero vigente principio de solidaridad entre los pueblos, porque este 1º de mayo no puede estar ajeno a los conflictos en el mundo. Vivimos una ofensiva del imperialismo en curso que va por más, por recursos energéticos como el petróleo, por recursos naturales como los acuíferos y lo campos de biodiversidad del planeta, va con su bestialidad en la búsqueda de consagrar su poder de dominación y erradicar toda posibilidad de amenaza a sus intereses, poniendo excusas irrisorias y hasta absurdas para cometen, sin que nadie chiste, todo tipo de violación a los derechos humanos socavando la soberanía de los pueblos, invadiendo así a estos países y saqueando descaradamente. Afganistan, Irak, Palestina, Libia, la incursión que planean hacia Siria, son algunos de los campos de batalla que allanan el camino hacia el aislamiento de la estratégica Irán para una posible invasión. Pese a todo se hace sentir la resistencia, no le es fácil a los poderosos concretar el arrebato. Las movilizaciones en Europa, la huelga general en España, las revueltas en Grecia y los países Árabes, la resistencia palestina, las luchas indígenas, los estudiantes que no se callan, los trabajadores y jubilados que no dejan de luchar son algunos de los conflictos que nos muestra que los pueblos nos están mansos y que las estructuras del capital no son infranqueables.
Pero la partida se da en todo nivel y el tablero de juego se extiende a lo comercial, diplomático, cultural, ideológico y militar posicionando sus bases y flotas en puntos estratégicos del continente. Las campañas en Haití y el Congo que le hacen el juego a las siniestras pretensiones de saqueo que el imperio tapa con sus ‘misiones de paz’. Colocando sus caballitos de batalla mediante gobiernos locales en nuestra América Latina donde con el pretexto de la integración abren venas de saqueo con la construcción de infraestructura a través del Plan IIRSA. Ante esto no podemos sino estar junto a los movimientos sociales que resisten y saludar la Contra Cumbre de los Pueblos que se llevará adelante ante la Cubre Río+20 de los gobiernos y empresarios.
A nivel país se vive sí un fuerte crecimiento económico sin precedente en los últimos años, pero el reparto es desigual e injusto y desfavorable siempre a la clase trabajadora. La táctica del doble pensar, salida de la imaginación de Orwel, hace carne acá cuando se sostienen dos discursos, dos pensamientos y múltiples intereses cuyas contradicciones son partes simultaneas de un mismo programa de gobierno. Parece de novela. Una es la idea del supuesto cambio sostenido por la esperanza de la gente que levantó por generaciones y desde las bases populares su alternativa electoral, por otro lado la palabra que a la derecha y a los burgueses se le asegura el continuismo de las políticas macroeconómicas, y en el paquete le ofertan también la contención popular para que no se pida ‘lo imposible’, reclamando cosas que se señalaban en las promesas electorales.
El doble pensar en lo político se expresa en el doble juego de las estadísticas, veamos: Si analizamos el salario real de los trabajadores, indudablemente en crecimiento en estos últimos años, gracias a la reinstalación de los Consejos de Salario, -herramienta que también tiene su doble filo depende de cómo nos paremos- no ha acompañado las curvas en los índices del crecimiento económico y las enormes ganancias se quedan así en pocas manos de los empresarios, principalmente de las trasnacionales marcando una clara pérdida de soberanía nacional, y en la balanza no afecta a los de arriba que, como en Argentina, chillan a panza llena y desde sus cuatro por cuatro, sino más bien se siente en la perdida de poder adquisitivo del trabajador y del jubilado. Suben los precios a un ritmo más acelerado que los reajustes de los salarios y de jubilaciones. La torta crece pero como se dice “solo las migajas quedan en la mesa de los pobres”, para los más excluidos o caracterizados indigentes (si tienen suerte) bonos canjeables en supermercados, canastas y comedores del INDA. La brecha de ingresos es enorme señala el Instituto Cuesta Duarte (Pit-Cnt) donde “el 20% más rico de la población se apropia de casi la mitad del ingreso nacional, mientras el 20% más pobre apenas se apropia del 5,7%”, el informe también señala que hay “Medio millón de trabajadores uruguayos sin cobertura social y 180.000 son los subempleados”.
Con respecto a los índices de desempleo también hay dos manuales, si bien se señala en el Instituto Nacional de Estadísticas INE que este ha decrecido sustancialmente bien sabemos que la varilla de medida para sostener este diagnóstico es frágil: empleos precarios, temporales, inestables, los cuales no deben incidir en los cuadros y gráficos de evaluación de forma tan decisiva, o no tendrían que hacerlo. Se apuesta a la inversión extranjera sin muchas contrapartidas, la plata se va liquida del país para las arcas de las trasnacionales y también para los organismos de créditos internacionales que reciben al pie de la letra suculentas sumas de dinero solo de pago de intereses de la deuda externa y a los de abajo el sueldo se nos va como agua entre las manos. Es cierto si, son tiempos de bonanza dicen los de arriba.
Desde nuestra opinión, si bien las expectativas del movimiento popular están cifradas en el terreno electoral de 2014 y algunos de sus cuadros dirigentes se encuentran preocupados por la campaña interna del FA, no podemos dejar de mencionar algunas peleas, de las que nuestro pueblo acostumbra protagonizar más allá de todo y esto por suerte no se ha perdido, la llamita sigue encendida porque la cuestión social aún sigue sin resolverse. Algunas luchas a señalar son:
Las tierras y ganado del viejo trabajador Ney Thedy. No tienen vergüenza, el único cañero que accedió a alguna parcela de las que se peleaban en los `60 y `70 fue desalojado por el INC por el atraso de unos mangos, pero subsidian sin problema a las transnacionales que en muchos casos se benefician de exoneración de deudas enormes e impuestos. Tehdy no baja lo brazos y continúa la lucha, rodeado por su gente.
La lucha de los peludos en Bella Unión por tierra para trabajar no encuentra eco en las autoridades que hace miles de vericuetos para demostrar que no hay tierras disponibles, argumentos que caen ante las ventas de tierras a extranjeros y empresas que la concentran y se llevan los frutos para otro lado. Pero los peludos encuentran eco sí entre algunos sectores del pueblo que no hipotecan la lucha por votos. Las luchas populares no deben ser campo de cultivo para cosechar logros electorales de ningún tipo.
Pobladores y productores que luchan contra la instalación de la minera Aratirí al tiempo que desde los ámbitos de gobierno se ajusta el código minero para no trabar el paso de las transnacionales de la minería a cielo abierto, que junto al monocultivo de soja y eucaliptos ponen a nuestros recursos y bienes naturales en la mesa de remate al mejor oferente, además la minera plantea llevarse el hierro bruto, no desarrollar la industria siderúrgica, cosa que el gobierno tampoco contempla, ese modelo de exportar comodities (materia prima)al igual que en la agricultura, no promueven un desarrollo con justicia social ni sustentabilidad para el país. Extranjerización de la tierra y concentración como nunca antes es lo que hay.
Docentes y padres de los alumnos que ocupan los liceos para que mejoren las condiciones y por la educación pública. El presupuesto para la educación lejos está de un 6% que se pide desde el campo popular y ese 4,5 que llegan regateando, termina siendo un 3,9 ya que incluyen en él a la educación privada y militar. Condenamos la represión acaecida en el liceo 70 y a todos los arrebatos de la policía, amparada por la ley antipopular que criminaliza la ocupación de espacios públicos y permite el desalojo por la fuerza.
La lucha por los derechos humanos a tenido tires y aflojes en estos últimos tiempos, pero ha permanecido gracias a la denuncia y movilización de las diversas organizaciones de DD.HH. Mientras cae la ley interpretativa a presión de una resolución de organismos internacionales de Derechos Humanos aparecen los restos de Julio Castro y ahora de Ricardo Blanco torturados a muerte y desaparecidos. Estos hallazgos indudablemente que también son la muestra de que hay información en cuanto a donde están enterrados los restos de los que aún no han sido encontrados. Por Ubagesner Chaves, por Fernando Miranda, por Julio Castro, Ricardo Blanco y todos quienes dejaron su vida por un mundo mejor, hay que seguir organizando y hay que seguir luchando, reclamando justicia contra quienes cometieron los crímenes de la dictadura y contra quienes los promovieron.
Por derecha se impulsa la baja en la edad de imputabilidad para los menores infractores, por ‘izquierda’ operativos de saturación en los barrios pobres, desalojos, criminalización de las luchas y políticas represivas, para muchos hacinamiento en las cárceles. Al tiempo que se conforma un nuevo organismo para atender el tema de los derechos humanos, nos referimos a la Institución Nacional de DDHH que solo si existe un decidido contralor de las organizaciones populares se presionará para que sea un organismo efectivo o por lo contrario otro intento para tapar el ojo al mejor estilo de la Comisión para la Paz.
Construir una alternativa para el cambio social
Seguros de que es con organización y lucha, fortaleciendo las organizaciones sociales, aportando brazos y mentes en los sindicatos, en los centros estudiantiles, dinamizando la organización de los barrios, creando medios de comunicación alternativos, comunitarios y populares, en las luchas por la tierra, los bienes naturales y por los derechos humanos. Conscientes de que avanzamos si apostamos a la independencia de clase y no a la cooperación poli clasista; a la autonomía de nuestros movimientos sociales como sujetos políticos y no a la subordinación a intereses de fuerzas electorales; a recobrar la esperanza en un nuevo mañana sin explotados ni explotadores, sin oprimidos ni opresores y no a la resignación y expectativa de esperar que venga desde el gobierno. En la apuesta de construir una alternativa de cambio social, creando poder popular y conciencia de lucha para avanzar en el camino de las transformaciones por el que solo se va si a la barbarie capitalista se le postula una vía clara hacia el socialismo. Porque hay que seguir haciendo realidad las palabras de August Spies, y hacer de su silencio el grito de liberación de los trabajadores y los pueblos oprimidos.
Por un 1º de Mayo
de organización y lucha
de organización y lucha
Por el socialismo y la libertad
ORGANIZACIÓN SOCIALISTA LIBERTARIA – URUGUAY
