lunes, 28 de marzo de 2016

EL IMPERIALISMO PASA REVISTA A SUS HUESTES MERCENARIAS

La recorrida por algunos países de América Latina del presidente norteamericano Barack Obama, diez años después de una que hiciese su predecesor George W. Bush, ha motivado desde distintos ángulos comparaciones en las que Obama saldría favorecido, como impulsor de una política imperialistapretendidamente más "moderada".

Como Coordinación por el retiro de tropas de Haití manifestamos que, si para muestra basta un botón, la política norteamericana en Haití al día de hoy no solo continúa la intervención imperialista comenzada hace un siglo, en particular apuntalando e impulsando la actual ocupación militar del país desde más de diez años, sino que además, si hay un cambio en curso, es para peor.

Denunciamos que EEUU con el gobierno de Obama ha sostenido hasta el último momento el régimen de Martelly, dictadura duvalierista. Ha respaldado el intento de perpetuación de ese régimen por medio del fraude electoral, que fracasó por la rebelión masiva del pueblo haitiano. Día a día intenta rescatar lo más que pueda de ese régimen derrocado, restaurarlo y darle una nueva forma. Toma las decisiones estratégicas en Haití, de carácter político, económico y militar. No ha tenido empacho en dictar instrucciones detalladas sobre lo que tienen que hacer las instituciones haitianas para culminar la reconstrucción de un estado neo-colonial bajo su mando. Esta política sigue representando los intereses de las transnacionales capitalistas que llevan a extremos inauditos la explotación del pueblo haitiano y la devastación de sus recursos naturales. En todo esto además está ampliamente probado el involucramiento directo de la candidata a suceder a Obama, Hillary Clinton.
Al caso de Haití se suma una larga serie de acciones imperialistas del gobierno de este "Premio Nobel de la Paz", en Latinoamérica y el mundo. Impulsar golpes de estado, concretados o fallidos en Honduras, Venezuela,  Bolivia, Ecuador, Paraguay, Brasil. Apoyo a gobiernos siniestros en Méjico, Colombia, Guatemala y más. Intervenciones en Irak, Siria, Libia, Ucrania, etc.
Y no podemos silenciar aquí la participación del Estado uruguayo y los sucesivos gobiernos, hasta hoy. De nuevo, si para muestra basta un botón, su servidumbre mercenaria en el tema haitiano y la participación continuada en la ocupación militar de ese país es una vergüenza. Y, de nuevo, si algo cambia, es para peor. Al caer sucesivamente todas las justificaciones dadas a esta intervención, queda cada vez más al desnudo el servilismo pro-imperialista de la política exterior uruguaya, y los intereses corporativos del aparato militar, ambas cosas en continuidad con las fuerzas que fueron la base del golpe en Uruguay hace 43 años. Lo único que ha cambiado son los aliados que esta política pro-imperialista tiene.
Por el respeto a la autodeterminación del pueblo haitiano, por el respeto a la dignidad del pueblo uruguayo, y por la independencia y emancipación de todos nuestros pueblos
RETIRO INMEDIATO E INCONDICIONAL DE TODAS LAS TROPAS EN HAITÍ
¡VIVA HAITÍ LIBRE!
FUERA YANQUIS DE TODA AMÉRICA LATINA
Coordinación por el retiro de tropas de Haití