martes, 1 de julio de 2014

MEMORIAS DE RESISTIR - 1973-27 DE JUNIO-2014


Al cumplirse 41 años de la HUELGA GENERAL CON OCUPACIÓN DE LOS LUGARES DE TRABAJO, en repudio y en respuesta popular organizada al golpe civicomilitar del 27 de Junio de 1973, conviene hacer balance y poner sobre la mesa algunos asuntos humanos de actualidad.
Lo primero es el RECUERDO Y TRIBUTO a quienes llevaron a cabo aquella corajuda, heroica, valiente y ejemplar medida de LUCHA POLÍTICA, contra el oportunismo civicomilitar nazifascista que usurpo el gobierno y militarizo las Instituciones democráticas en el Uruguay. A partir de aquella madrugada del 27 de Junio de 1973, un grupejo, un grupúsculo de vendepatria encabezados por el propio Juan María Bordaberry y sus secuaces civiles y militares, disolvieron las Cámaras en el Parlamento, Prohibieron las libertades públicas e individuales y sentaron las bases para el TERRORISMO DE ESTADO, que se nos impuso hasta 1984.
La HUELGA GENERAL con ocupación de los lugares de trabajo, convocada por la dirección sindical de la CNT (Convención Nacional de Trabajadores), fue la medida de lucha política organizada al golpismo y al gorilismo terrorista impuesto por el propio IMPERIALISMO yanqui y sus socios y secuaces de turno.

La medida de lucha política, acordada en la CNT y puesta en práctica a partir de aquel 27 de Junio de 1973, fue advertida y denunciada por el dirigente del Congreso Obrero Textil (COT), HÉCTOR RODRÍGUEZ. Este militante y referente de nuestra clase obrera y trabajadora organizada, tuvo información de una famosa “buseca subversiva”, que se hizo en la casa de la empresaria Celia Ferres en Punta Yeguas en 1964. En esa “buseca” participaron varis políticos y militares conocidos y reconocidos (algunos en actividad) y se supo “no vieron con malos ojos” el Golpe de Estado y el derrocamiento del gobierno democrático en Brasil en ese mismo año.
Héctor Rodríguez lanzo la alarma pública del hecho político, denuncio lo ocurrido en todas las tribunas donde se lo permitieron y puso en alerta, a todo el sistema político sobre la gravedad de esa reunión de personeras y personeros en Punta Yeguas. Fue así que la dirección sindical de la CNT, puso el tema a consideración, discusión y debate de todas las organizaciones sindicales y gremiales, pertenecientes al Movimiento Obrero Uruguayo. Y en 1965, en ocasión de la convocatoria al CONGRESO DEL PUEBLO, el asunto fue denunciado, explicado y fundamentado al resto de los sectores de nuestro Pueblo que estuvieron representados. Desde aquellas instancias de organización popular colectivas, se asumió el compromiso de responder con HUELGA GENERAL CON OCUPACIÓN DE LOS LUGARES DE TRABAJO, a cualquier intentona golpista que se quisiera imponer en el Uruguay.
Es que en aquellos años 60, el golpismo civicomilitar nazifascista acechaba permanentemente por todo el continente  suramericano. Y vinieron los avances en los niveles de organización y conciencia de nuestro Pueblo trabajador: se acrecentaron las LUCHAS POPULARES , las movilizaciones callejeras, las marchas populares, las ocupaciones de las fábricas, talleres, liceos, universidades y facultades, peajes solidarios, ollas populares y barriales, las famosas barricadas en el Cerro de Montevideo, las protestas contra los ajustes impuestos por el FMI y sus recetas económicas, generando incluso el apoyo a las luchas sociales de otros sectores de la sociedad como el estudiantado, pequeños y medianos productores, comerciantes e industriales que se aliaron.

Y también los gobiernos de turno como el Colegiado blanquiColorados y coloriblanco, el PACHECATO y los primeros años de los años 70 con Juan María Bordaberry, nos trajeron los asesinatos y crímenes políticos impunes  y la REPRESIÓN como respuesta a las luchas organizadas de nuestra clase obrera y trabajadora junto  al resto de nuestro Pueblo. No olvidamos aquel TIEMPO DE LOBOS como lo denuncio en su libro Alba Roballo, ni aquel PRIMER DISPARO de la nochecita del 17 de Agosto de 1961 en la Explanada Universitaria, cuando asesinaron al profesor ARBELIO RAMÍREZ. Y tampoco olvidamos lo de 1968, cuando el PACHECATO fascistoide le robo la vida a LIBER ARCE, a HUGO DE LOS SANTOS y a SUSANA PINTOS.
Y las LUCHAS populares siguieron resistiendo y creciendo en CONCIENCIA POLÍTICA, entablando más vínculos y alianzas con el resto de nuestro Pueblo y pagando con MÁRTIRES  esos avances colectivos.
Siguieron cayendo luchadoras y luchadores sociales y militantes políticos, sindicales, estudiantiles de la época: HEBER NIETO, SANTIAGO RODRÍGUEZ, JULIO SPOSITO, IBERO GUTIÉRREZ, JOAQUÍN KLUVER y  los asesinados en plena Huelga de 1973, RAMÓN PERE y WALTER MEDINA. Y como parte de todo aquel “combo”, las persecuciones, los encarcelamientos, las torturas en los cuarteles, las proscripciones, las prohibiciones, los decretos fascistoides, las clausuras de medios de prensa, la militarización de los Entes públicos, la disolución del Parlamento, las medidas prontas de seguridad, el estado de guerra interno, la derrota del MLN Tupamaros y el Golpe civicomilitar nazifascista de 1973.

Y “la huelga no sirvió para pararlos, pero los marco a fuego e hizo que la Dictadura naciera huérfana de apoyo popular”, como lo explico Héctor Rodríguez  en su casi autobiografía “EL TEJEDOR”. Y  ellos nos impusieron a sangre y fuego, a rajatablas el NEOLIBERALISMO  como sistema de vida y la política económica neoliberal, como el nuevo “Plan de ajustes” contra nuestro Pueblo y otros Pueblos en el Conosur Americano. Y con ello, también nos imponen el MIEDO, el TERRORISMO DE ESTADO, el PLAN CÓNDOR y la OCOA en total acuerdo y absoluta connivencia con el IMPERIALISMO  de turno. Y no olvidamos que la DICTADURA fue nazifascista  y fue CIVICOMILITAR, porque hubo no menos de 150 civiles vinculados e integrados al nuevo “proceso” fundado por el dictador Juan María Bordaberry y los golpistas del PACTO DE BOISO LANZA ( 9 al 12 de Febrero de 1973), que mantuvieron y aplicaron en materia de política económica neoliberal personeros como : Valentín Arismendi, Alejandro Vegh Villegas, Moisés  Cohen, Enrique Iglesias, Ramón Díaz entre los más conocidos afiliados al Club de los “Chicago Boys”( Muchachos de Chicago) que fundaron esta especie de secta junto a Milton Friedman.
Sin embargo y a pesar de los pesares, también hubo LUCHA CLANDESTINA, organización a escondidas y disimulada, batallas de ideas a resguardo de los milicos, de los buchones y de los ortivas, movidas a riesgos totales de ser descubierto o entregado a los milicos y SOLIDARIDAD. Todo aquello que se pudo hacer para intentar derrotar a la Dictadura, todo lo que se hizo desde adentro y desde afuera, desde el inxilio y el exilio, desde las cárceles y aun desde el MIEDO que nos impusieron, fue producto y consecuencia de los ejemplos y las luchas populares que venían gestándose desde los años 40. Fue justamente aquella generación formidable de la década del 40, la que fundó los sindicatos, los gremios y las organizaciones sociales y populares en el Uruguay.
Fue aquella generación de hombres y mujeres, la que promovió los acuerdos, los entendimientos, las alianzas que hicieron posible la fundación de la CNT en 1964 y del CONGRESO DEL PUEBLO  EN 1965. La misma  generación de mujeres y hombres, que se pusieron al frente de la HUELGA GENERAL de 1973 y que siguió luchando y RESISTIENDO como pudo y desde donde pudo contra la Dictadura civicomilitar nazifascista.

Y aquella generación de los años 40, fue la GENERACIÓN DE HÉCTOR RODRÍGUEZ, GERARDO CUESTA Y LEÓN DUARTE, que simbolizan en forma emblemática a las corrientes ideológicas y de pensamiento en el seno del Movimiento Obrero y Popular uruguayo. Son decenas, centenares y miles de militantes, referentes, luchadoras y luchadores políticos y sociales que se comprometieron con su clase y con su Pueblo, dando la razón al poeta español Antonio Machado: “los señoritos hablan mucho de la Patria, pero son los trabajadores quienes la defienden con su vida y con su sangre”.
Pero han pasado 41 años, ha corrido mucha agua debajo de los puentes y muchas cosas han cambiado. Algunas para bien y otras para mal y para peor.  La actual  “dirigencia sindical del actual PIT-CNT”, no se parece en nada a aquella de hace 41 años atrás. No tiene nada que ver, con aquellas conductas y actitudes de quienes representaron a nuestra clase obrera y trabajadora, en aquellos años. Nada que ver, con aquella generación fundadora de la CNT y con quienes  siguieron manteniendo la llama sagrada encendida a pesar de los pesares. Incluso, con quienes dieron hasta su vida, defendiendo las causas de nuestro Pueblo.
Hoy en este 2014, tenemos “dirigentes sindicales del PIT-CNT” que llevan muchos años sin trabajar, fuera de la producción, sin tener que levantarse de madrugada, esperar ómnibus durante horas, viajar como ganado, marcar tarjeta, aguantar encargados y capataces de lo peor y sufrir en carne propia la explotación capitalista.
Tenemos supuestos “dirigentes sindicales” en el PIT-CNT, que le hacen campaña electorera a los políticos de turno, viajan con el gobierno de turno como parte de la “delegación oficial”.
Almuerzan con empresarios, ministros y gente del gobierno en lujosos lugares y aparecen fotografiados con los explotadores de nuestra clase social y de nuestro Pueblo. Van en las listas al Parlamento, sin dejar claro si representan a nuestra clase obrera y trabajadora uruguaya o al Partido político al que pertenecen, apoyan, promueven y defienden “proyectos” como UPM, Montes del Plata, ARATIRI, Puertos de Aguas profundas en Rocha, Zonas Francas, Puertos Libres, nuevas Plantas de Celulosa, la Forestación indiscriminada, los plantíos de Soja, la contaminación y el envenenamiento del medioambiente, las exoneraciones impositivas, las rebajas de aportes sociales al Estado, las regalías y las prebendas a supuestos inversores privados extranjeros.

Supuestos “dirigentes sindicales del PIT-CNT”, que apoyan las misiones militares mercenarias uruguayas en Haití, Congo y donde sea, son a la vez “pequeños empresarios” dueños de tercerizadoras de servicios con mano de obra poco calificada y muy barata, que contratan con la propia fábrica en donde “dicen trabajar” y con el propio Estado. Y supuestos “dirigentes sindicales “del PIT-CNT, que son acusados de corrupción y fraude en asuntos humanos tan sentidos como la construcción de viviendas para trabajadoras y trabajadores y sus familias.
Y hoy en estos tiempos de gobiernos “progresistas” que se dicen “de izquierda”, en este 2014 a 41 años de aquel no tan lejano y reciente 1973, hasta se la creen y le hacen creer que tienen algo que ver con aquella GENERACIÓN  que nos legó el ejemplo, la dignidad, el coraje, la valentía, el compromiso con la JUSTICIA, la IGUALDAD y la REVOLUCIÓN
Abrazo fraterno,
Rodolfo Bisquiazzo Aquino